No le digas tu nombre, no le muestres tus miedos, no lo beses con ansias... que lo que te espera es amor y dolor.
Piérdete en la maldición de amores desconocidos, de amantes furiosos y sueños de olvido.
Sueñas que olvidas, pero sabes que mañana tal vez será el día en que todo se acabe, que tu alma se halle perdida entre espinas y rosas que pierden la vida, el amor y el dolor de perderlo todo porque todo está perdido.
El todo que se vuelve una persona, el todo que forman tus miedos, tu nombre y tus besos.
Merezco el dolor de entender el amor, de saber que no existe, que soy sólo yo, que vivo en mentiras que me hago ilusiones que pierdo conciencia de mis acciones cada vez que te cuento mis miedos, mi nombre y te beso.