Wednesday

Alter-ego.



A veces es necesario liberar el deseo del alma y dejar que entre en nuestros pensamientos, dicho de otra forma escupirle a la mente lo que el corazón quiere. 

Hacer lo contrario resulta imposible, absurdo e improbable. Si no hacemos lo primero, entonces nos volvemos conductas generales. Todas las conductas y personas tienen su antagonista, su conducta inusual, su alter-ego.

Es mi segunda personalidad dentro de mí misma, mi complemento, acceso ilimitado a todos los rincones de mi subconsciente y mi memoria, no es lo que me guía o me ayuda, es eso que me hace caer y cavar y cavar mas hondo hasta no poder más para luego enterrarme, nunca salir de ese hueco lleno de calaveras y brazos que sueltan burbujas en forma de ojos y que miran hacia los dientes que salen de las paredes mientras ella cierra su boca y me doy cuenta de que he caído en tu trampa, su tentación de ir mas al fondo y ahora está a punto de devorarme y apoderarse de mí. 
Hasta que le recuerda que no soy yo, que es ella, que yo soy su alter-ego. Observadora, sus recuerdos, su locura y esa parte de ella que no la domina, pero quiere salir. Entonces todo vuelve a ser normal, tan normal como una pelea que vuelve a empezar.